El ministro de
Protección Medioambiental de Ucrania, Ruslan Strilets, acusó hoy a Rusia de
haber causado 10.000 millones de euros en daños a la infraestructura hídrica
ucraniana desde el inicio de la invasión, incluidos 3.500 millones de euros
atribuidos a la presa ucraniana de Nova Kajovka que Moscú destruyó el año
pasado.
"El medioambiente no tiene fronteras.
El agua no discrimina entre naciones", declaró Strilets en el marco de la
Semana Verde de la Comisión Europea, centrada este año en el agua, quien
advirtió que los desastres medioambientales causados por Moscú en Ucrania
pueden afectar indirectamente a países vecinos, incluida su enemiga Rusia.
El ministro, invitado a la conferencia de
dos días conocida como Semana Verde que organiza en Bruselas la Comisión
Europea, y que este año está dedicada al agua, acusó a Rusia de
"terrorismo acuático" y medioambiental.
Las autoridades ucranianas han registrado
unos 5.000 casos de ataques al medioambiente ucraniano con más de 70.000
millones en daños, lo que supone "20 veces el presupuesto anual de
Naciones Unidas", y al menos 257 casos de ecocidio, como destruir plantas
químicas para contaminar los ríos. "La cuenta sigue", añadió.
Solo la destrucción de la presa Nova
Kajovka, que dejó 63.447 hectáreas inundadas, supuso la pérdida de suficiente
agua para abastecer a todo el planeta durante dos años, indicó.
Info y foto: EFE