La Selección de San Marino ganó el primer partido oficial de toda su
historia.
San Marino, considerado el equipo más débil
del mundo según el ranking FIFA, donde ocupa el puesto 210, logró un hecho
sorprendente: rompió una racha de 141 partidos sin ganar al vencer 1-0 a
Liechtenstein en la UEFA Nations League en este 5 de septiembre de 2024.
El joven de 19 años, Nicko Sensoli, fue el
héroe del partido al marcar el gol decisivo que terminó con veinte años de
derrotas, siendo la última victoria también contra Liechtenstein el 28 de
abril de 2004, pero en un encuentro amistoso.
El tanto llegó en el minuto 52, tras
un centro que fue mal defendido por los rivales. Sensoli aprovechó el error,
alcanzando el balón para batir al portero y dar la victoria a su equipo.
Este logro adquiere mayor relevancia al
considerar la larga sequía de victorias de San Marino, con un balance de 141
partidos sin ganar, logrando apenas seis empates y sufriendo 135
derrotas. Durante esta racha, el equipo solo anotó 21 goles y encajó 568.
La victoria también ha generado un impacto
significativo en San Marino, un pequeño país con una población de
aproximadamente 36,000 personas repartidas en 61,2 km².
Más allá de lo que esta victoria pueda
significar en términos de puntos o clasificaciones futuras, lo más importante
para San Marino es el impacto emocional y el significado histórico de este
triunfo para el país. Un simple gol ha puesto fin a veinte años de frustración
futbolística, devolviendo la esperanza a un equipo que por mucho tiempo fue
conocido como “la peor selección del mundo”.